Acabamos de vivir la séptima edición del Festival Hipnosis, y con un cambio de sede unas semanas antes, muchos cambios en su organización pero un line-up tremendo, tenemos que decir el resultado.
Hablemos algo más resumido, ya que quizás hayas revisado antes otras reseñas o tal vez tengas tu propia crítica que nadie te sacará de la mente.
LO MALO
Como tal, no es nada malo que neta digas, merecen que se cancele (aún); pero hablemos de los casos que se pueden mejorar o no tienen sentido.
Primero, el Vaso conmemorativo, ya que se supone que al comprar este vaso, el uso es de tener un uso sustentable dentro del festival, justo por eso es un vaso, para rellenar, y aunque evidentemente no son OCESA, para tener sus máquinas o sus purificadoras de agua, pues tampoco sentí que estuvo tan chido regalar botellitas de agua ciel de menos de 250 ml. Para esto mejor regálalas o no digas que el vaso es para el agua.
Otra parte fue que no había transmisiones para el público alejado de los escenarios, sabemos que este festival se caracteriza por tener escenarios sencillos, sin pantallas a los costados, pero si estaban transmitiendo, al menos para el otro escenario.
Pero justo, había mucho público descansando hasta atrás, tanto en el jardín como gradas y pues, sólo teníamos una pantalla con luces hipnóticas pero hubiera sido mejor ver el concierto, así la gente descansaba y no se perdía de los actos.
CASHLESS
Hablemos ahora sí de lo malo, lo nefasto, lo que hizo pegar corajes.
Primero, implementaron un sistema cashless nuevo, es original para esta producción, ya que te daban una tarjeta como si de banco se tratara, y si la revisan dicen Grupo Indie Rocks ¿También nos servirá para gastar en el Foro Indie Rocks o House Of Vans?
Bueno, el simple hecho de tener una tarjeta es algo peligroso, ya sea porque la puedes perder por accidente o apropósito, alguien te la puede cambiar sin que te des cuenta o sencillamente es más inútil, una pulsera la tienes rápido y a la mano (literal).
Pero entiendo que no sea un sistema cashless como el de los festivales de ocesa, bueno, dejando esto; su sistema era una mierda, a mí me tocó que le metíamos cierta cantidad y cuando revisábamos a la hora de comprar, nunca se había depositado, sino fuera por los tickets que guardamos y fuimos a reclamar, quién sabe como hubiéramos recuperado.
Afortunadamente la gente de cashless nos atendió bien y relativamente sin problema, nos devolvió el saldo pero fuimos uno de otros 100 casos que al menos me percaté.
Ahora, yo pregunté el precio de los vasos, $50 cada uno, perfecto, para tener la tarjeta nos pedía un previo de $20 para “activación”, sin hacerla de a pedo, lo hicimos, metimos $120 de los cuales sólo teníamos $100, ahora si juntas el tiempo de la fila de cahsless más la de los vasos, nos perdimos el set de Melody Fields, solo para que fuera nuestro turno y nos dijeran “Saldo insuficiente jóven”.
¿Porque? No sé joven, así me aparece mire. Me enseñó que justamente le daba el cobro por servicio en automático, $10 por cargos, en total me cobraban $110, a lo que no me molesté en el momento, le pedí a quien me atendía que me quitara el cobro, que yo se los daba ahí mismo pero que no me hiciera formar de nuevo en el cashless.
Ya que perdí tiempo en formarme para recargar y entre la fila del vaso, nos perdimos a Melody Fields. Me decía que no podía hacerlo, y para esto recargamos después $20 más, ya que no podíamos recargar solo los 10, lo mínimo eran $20.
Volvimos por el vaso, y pum, oh sorpresa, resulta que había otra vez un error, a lo que era más probable que saldo insuficiente. Nos fuimos rápidamente a la cashless de entrada para preguntar que estaba pasando.
Había una pequeña fila ya de personas que querían quejarse, y nosotros veníamos con más cola detrás, cuando la señorita encargada em atendió, me dijo que efectivamente sólo tenía los mismo $100, le dijimos que habíamos metido otros $20 y si no fuera por nuestro comprobante ¿Quién sabe como nos hubieran ayudado a depositar de nueva cuenta ese dinero?
La atención fue agradable pero justo, no se tendría que haber llegado a este punto si su sistema cashless fuera funcional y práctico.
LO BUENO
Sin duda algo que si hay que mencionar, es que el cambio de sede unas semanas antes fue totalmente positivo, el lugar está cerca del metro, no tan céntrico ni en los típicos lugares de siempre.
Está adecuado para un festival chico como este, ya que es corto y te puedes dar la vuelta rápido; el área de baños fue muy accesible y pusieron más urinales para agilizar el paso y se agradece que pusieran aunque sea gel anti bacterial (no como en el velódromo).
Ojalá se tome en cuenta esta nueva sede para seguir haciéndola, ya que este festival sufre de una identidad como sede, y pues si hubo un cambio a último momento, fue porque lamentablemente no vendió como se esperaba y hacerlo en el bosque sale caro.
Quizás el line-up que atascó fue en 2022 con Mars Volta, no crean que sale barato rentar el Bicentenario, así que denle la oportunidad a este estadio poco conocido para empezar una nueva tradición.
Y en cuestión de las bandas, lo dejaré de lado, ya que vi muchos comentarios entre si o no, por ejemplo, unos ponen en alto a The Kills y otros los hizo dormizzzz, al igual que Mdou Moctar o Slowdive que se rifaron con su set de Día de Muertos.
Pero los que sí prendieron a pesar de que la gente no los conocía, Franki and Wotch Fingers que armaron el slam, además de que antes de empezar aventaron los de Miniso unos peluches de pollo que fueron la sensación.
Sin duda eso muestra lo comprometido que fue Miniso como patrocinador, eso si dan ganas de verlos más seguido. Y pues que no hablar de el show más esperado, Air.
Quienes con su escenografía de marco blanco, lucieron pulcros y resaltaban con las luces, además de tener temas icónicos con el “Moon Safari” de principio a fin. ¿O cuál fue tu parte favorita?
